Ocurrió el 11 de octubre en el colegio María Montessori de Ballester.
Cuando el alumnado, el personal y los familiares se aprestaban a realizar el acto por el día de la diversidad, un chiquito de 8 años llamado Giany comenzó a llorar y a gritar. Su madre advirtió la situación y se acercó hasta el pequeño para asistirlo, lo encontró con serias quemaduras en las piernas, cuello, pecho y brazos.
A causa de su autismo, Giany no ha podido decir lo que le ocurrió.
Una directiva y una docente que se hallaban junto al niño, argumentaron que el accidente se habría producido en la cocina, cuando otro niño tiró la pava derramando el agua hirviendo sobre Giany.
Los padres descreen de la versión, y piensan que las autoridades podrían estar encubriendo otra realidad que pudiera comprometerles.
El chiquito ya fue operado ocho veces en un mes, y por la gravedad de las lesiones, los médicos presentaron la denuncia en la justicia, que ya está investigando lo sucedido.
A pesar de que las autoridades del colegio se comprometieron a responder con el seguro de la institución, hasta el momento no se han hecho cargo, y la familia debió cubrir todos los gastos ocasionados.
