Durante la jornada de ayer, la reunión de los martes en Olivos, giró en torno al plan de seguridad que el gobierno nacional lanzará para la provincia de Buenos Aires.
El presidente está decidido a poner manos a la obra para combatir el delito en el área históricamente más comprometida del país en materia delictiva.
La inversión que destinará el gobierno estará superando los 10.000 millones de pesos, que serán destinados a la compra de 2000 patrullas, cámaras de seguridad, incorporación de nuevos efectivos, refacciones en comisarías, instalación de botones antipánico y la construcción de módulos carcelarios.
Participaron de la reunión, Gabriel Katopodis, Santiago Cafiero, Wado de Pedro, Sergio Massa, Máximo Kirchner, y algunos intendentes del conurbano, entre los que se encontraba Fernando Espinoza, quien protagonizó la nota de color, cuando exigió a todos los presentes ponerse los abrigos y abrió las ventanas del quincho argumentando que es necesaria la ventilación, para combatir el coronavirus.
No estuvieron presentes Sergio Berni ni Sabina Frederic, quienes mantienen diferencias de público conocimiento. También existen tensiones entre Berni y algunos intendentes, sobre todo los oficialistas, aunque en el gobierno provincial afirman que el ministro conserva el respaldo del ejecutivo, a pesar de las controversias que protagoniza e incluso a pesar de las repercusiones del caso de Facundo Castro. Hasta el momento, la investigación apunta hacia la responsabilidad por parte de policías bonaerenses.
